Palabra PerfectaAsí empieza La palabra perfecta Silencio es mi palabra perfecta. Era. Creí que lo era. La voz que nombra su ausencia. El verbo del vacío de palabras. En verdad, no acierto a elegir un protagonista principal que no sean las palabras para esta narración que imagino entre la tristeza y la sonrisa, en un interludio que se asoma al amor. Quizá sean las palabras mal elegidas y las buenas palabras, las feas y las tiernas, las bonitas y las duras, las palabras dadas, las olvidadas, las perdidas. A través de las palabras, las desafiantes y las salvadoras, relataré mi propio despropósito, un penúltimo delirio. Confieso por gusto, en homenaje a las palabras, agradecido a las ideas que encienden el espíritu de los hombres buenos… Comparte esto:CompartirCorreo electrónicoImprimirMe gusta esto:Me gusta Cargando... Relacionado